Un poco de la historia de la moneda en Brasil.
Evolución de la moneda
El primer contacto comercial existente en Brasil tuvo lugar con la llegada de los portugueses, en 1500. Indios y colonizadores cambiaban productos como el pau brasil y artefactos indígenas, en la operación conocida como permuta. La circulación de monedas apareció sólo con la fundación de la Villa São Vicente (en el actual estado de São Paulo), en 1532, pero el cambio de mercancía como sal, especias y, posteriormente, azúcar y tabaco aún continuaba.
Con la formación de la Unión Ibérica, en 1580, el río de la Plata permitió el comercio con otros países y la consecuente llegada de monedas extranjeras al País. Los “reales” españoles llegaban por medio de las operaciones comerciales con Perú (colonia de España) y eran parte expresiva del dinero en circulación en Brasil hasta finales del siglo 17.
La ausencia de monedas suficientes ya afectaba al comercio en algunas regiones de la colonia. Por eso, el rey portugués D. Pedro II crea en 1694 la primera Casa de la Moneda Brasileña, en Salvador. Un año después, fueron creadas las primeras monedas brasileñas en oro, con valores de 1.000, 2.000 y 4.000 réis y también las de plata, de 20, 40, 80, 160, 320 y 640 réis.
Con eso, las distintas monedas extranjeras que circulaban en la colonia fueron progresivamente reemplazadas. Sólo en 1810 surgieron los primeros billetes de banco, precursores de los billetes actuales. El valor de cada uno era rellenado a mano, como se hace actualmente con los cheques.
El riesgo del transporte de monedas de oro y plata de las capitanías hasta Salvador evidenció la necesidad de la transferencia de la Casa de la Moneda a Rio de Janeiro en 1699. Al año siguiente, se trasladó a Pernambuco, donde se mantuvo hasta 1702, cuando fue transferida nuevamente a Rio de Janeiro en 1703. También fue establecida en Minas Gerais una Casa de la Moneda, que funcionó en Vila Rica desde 1724 hasta 1734.
La proclamación de la República, en 1889, consolidó los réis como el dinero estándar, y los billetes y monedas del Imperio fueron adaptados con los nuevos símbolos y alegorías de la República. El año 1922 marcó el fin de la acuñación de monedas de oro para circulación, cuando el alto costo del metal hizo inviable su producción, siendo adoptada en este momento la producción de billetes.
El fin del modelo réis, que regía desde el período colonial, tuvo lugar en 1942, cuando fue reemplazado por el cruzeiro (Cr$), y la equivalencia utilizada fue de mil réis por un cruzeiro (Rs 1000 = Cr$ 1,00).
La nueva moneda fue introducida para extinguir a más de 80 tipos existentes, haciendo del Tesoro Nacional el único organismo emisor y la Casa de la Moneda de Brasil la única fuente de monedas metálicas. La fabricación de los billetes estuvo a cargo del American Bank Note, de los Estados Unidos, y de Thomas de La Rue, de Inglaterra.
Con el objetivo de controlar el mercado monetario, el gobierno crea en 1945 la Superintendencia de la Moneda y del Crédito (Sumoc), transformada en Banco Central de Brasil en 1964. Entre sus funciones estaban el control del Sistema Financiero Nacional, el monopolio de la emisión de dinero y la gestión del medio circulante brasileño.
El año 1967 marcó la entrada del cruzeiro novo (NCr$), reemplazando el cruzeiro por la equivalencia de mil cruzeiros por un cruzeiro novo (Cr$ 1.000 = NCr$ 1,00). No hubo lanzamiento de billetes del nuevo estándar, y las antiguas recibieron un sello con el valor equivalente al cruzeiro novo. También fueron acuñadas monedas de centavos, fabricadas por primera vez con acero inoxidable.
Tres años después, en 1970, la moneda nacional volvió a ser el cruzeiro (Cr$), pero con el mismo valor del cruzeiro novo. La Casa de la Moneda de Brasil pasa a ser la única fabricante de dinero de Brasil, y por primera vez la elección de los billetes se hace por medio de concurso público. En 1986 la moneda pasa de cruzeiro a cruzado (Cz$); un cruzado valía 1000 cruzeiros (Cz$ 1,00 = Cr$ 1.000).
La alta inflación, que duró toda la década de 1980, culminó en 1989 con la creación de medidas para estabilizar la economía. El Plan Verano instituyó el cruzado novo (NCz$) para reemplazar el cruzado. La equivalencia era de mil cruzados por un cruzado nuevo (Cz$ 1.000,00 = NCz$ 1,00).
El año 1990 marcó una época en Brasil. El gobierno federal bloqueó los saldos en las cuentas bancarias y aplicaciones financieras de la población que disponía de más de 50 mil cruzeiros (hoy alrededor de R$ 5.000,00), y la moneda volvió a llamarse cruzeiro, aunque manteniendo el valor del cruzado novo. En 1993 fue creado el cruzeiro real (CR$), en reemplazo del cruzado, con valor equivalente a 1000 cruzeiros (CR$ 1,00 = Cr$ 1.000,00).
La URV (Unidad Real de Valor), instituida en 1994 como indexador único de la economía, indicaba la devaluación real de la moneda de acuerdo con los índices de la inflación. En aquel mismo año, el cruzeiro real fue reemplazado por el real (R$), moneda que circula actualmente en Brasil. Un real era igual a 2.750 cruzeiros reales, que era equivalente a un URV (R$ 1,00 = CR$ 2.750,00 = 1 URV).