La numismática me ha dado muchas satisfacciones a lo largo de más de 30 años (la última década ni que hablar), una de esas grandes satisfacciones es poder conocer gente.
Gracias a mi inquietud, y a inquietudes similares, es que nacen tratos amenos con personas que de otro modo no conocería.
Hoy quiero contarles una muy particular historia fruto de mi curiosidad y de la desinteresada mano que me brindo la otra persona protagonista de este relato.
Casi todos saben en la comunidad que mi fuerte hoy son los bonos/créditos del trueque…esa otra moneda, pero mi especialidad y fuerte, si es que de algo se, fueron los billetes rusos de todos los tiempos (imperiales, soviéticos y actuales) y de las demás repúblicas que conformaron la U.R.S.S.
Paralelamente a esta colección que acaparaba casi toda mi atención y recursos (monetarios y de tiempo robado al sueño) siempre me gustaron las fichas ese sustituto de la moneda…Durante mucho tiempo recorría ferias, anticuarios -la palabra les queda grande a mas de un cambalachero que veía- y cuanto lugar con monedas me cruzaba.
Más de una vez encontraba en tarritos/fuentes/latas/cajas, fichas de las mas variadas.
Si el precio no era alocado, generalmente no lo era, dado que no existían ebay, mercadolibre y demás fuentes tecnológicas actuales… terminaba junto con las restantes en una acumulación que después termine acomodando y llamando colección.
Siempre me gusta saber que es lo que tengo. Con las fichas muchas veces no se puede saber exactamente que es, a menos que se investigue.
La investigación sobre unas fichas de saladeros de la República Oriental del Uruguay me llevo a buscar, con las nuevas herramientas tecnológicas, aquello que no encontré en la plaza local.
Fue así como di con la pagina de Rodrigo Morales Bartaburu y su completísimo trabajo: Del saladero nacional al frigorífico extranjero
Aquí las fichas:
El saladero Destandau faenó entre 1885 y 1895.
El saladero Destandau faenó entre 1885 y 1895.
El Saladero de la Familia Tabares fue el último en cerrar sus puertas en 1928-29 (ficha de aluminio, existen ademas valores 10 y 1).
Aqui lo que Él me pudo aportar:
1) Saladero Destandau
No es mucho lo que le puedo aportar. Estaba en la Villa del Cerro, donde desde 1880 en adelante se habían instalado la casi totalidad de los saladeros de Montevideo (lo mismo ocurrirá luego con los frigoríficos). Y los pocos que no estaban allí, como es el caso de los de Tabares, se encontraban en las proximidades.
No existe ninguna referencia al saladero Destandau en la bibliografía que he consultado y su nombre sólo aparece en las planillas de faena por un lapso relativamente breve de tiempo. Por lo tanto me animo a arriesgar que se trató de un saladero no demasiado importante, no en cuanto al volumen de su faena sino al desarrollo tecnológico.
La firma E. Destandau figura por primera vez en las planillas de reses faenadas en Uruguay con destino a la industrialización (saladeros y fábricas de conservas) en 1885 y desaparece en las de 1898.
Hago aquí la salvedad de que en la documentación disponible (que no está completa), en los años 1896 y 1897 sólo se da cuenta de la faena discriminada de los 6 saladeros más grandes de Montevideo y el resto figura como “otros”. En resumen, con esta información podemos asegurar que el saladero Destandau faenó entre 1885 y 1895, y si eventualmente extendió su actividad en 1896 y 1897 fue con volúmenes pequeños (menos de 5.000 cabezas por zafra), algo poco probable ya que hubiesen sido muy inferiores a su media de la década.
Aunque en el plano de las hipótesis, no es para nada descabellado suponer que E. Destandau -quien por el apellido presumo francés, origen de muchos de los industriales del tasajo- fuese más un “inversor”, es decir un comerciante convertido en circunstancial saladerista, que un “industrial tradicional”.
Esto era muy habitual, y de ahí que fuese moneda corriente el cambio de la titularidad de las firmas. Porque además, como surge de mi trabajo Del saladero nacional al frigorífico extranjero, el requerimiento de capital de estas empresas era básicamente para comprar la hacienda (alrededor del 80% de la inversión total). De hecho, el arrendamiento de establecimientos saladeriles rudimentarios que no contaban con maquinaria sofisticada para procesar los subproductos de la faena, esto es que servían para producir tasajo, cueros salados, sebo y poca cosa más, significaban a los sumo el 2 por ciento de los gastos totales de una zafra. Tal vez Destandau ni siquiera fue propietario del establecimiento en el que faenaba, o inclusive cabe especular con la probabilidad de que en ese período lo haya hecho en más de un lugar. De todas maneras vale aclarar que en la serie estadística del período 1885-1895 el saladero de E. Destandau (así es como figura) tuvo un volumen de faena en el entorno de los 20.000 animales por zafra, lo que lo ubicaba en ese aspecto como un establecimiento “medio/grande”. A modo ilustrativo, chicos eran los que mataban hasta 5.000 cabezas por año, medianos entre 5.000 y 20.000, y grandes de allí en adelante. Como último dato referido al tamaño, digamos que los saladeros más importantes de Montevideo faenaban unas 40.000 reses por zafra (los ubicados en el Litoral tenían en promedio mayores volúmenes).
Sobre las diferentes inscripciones en las fichas del Destandau, es evidente que eran para pagar distintas tareas, las que a su vez recibían remuneración diferencial. Incluso más. Dentro del saladero ciertos trabajos tenían mucho más “prestigio” que otros, y algunos considerados “menores”, como el barrido y limpieza, eran realizados por niños (y cuando digo niños me refiero a criaturas de 7 u 8 años). Como dato anecdótico le cuento que el primer sindicato (de orientación anarquista, obviamente) en un saladero oriental del que se tiene alguna información surgió en 1883. Curiosamente no fue en uno de Montevideo sino en el Nuevo Paysandú, de Alberto Santa María e hijos (los Santa María eran porteños y se habían radicado en Paysandú a mediados del siglo XIX). Pero lo interesante del caso es que de él sólo participaban los desolladores y su nombre -curioso y revelador- era Sociedad de Resistencia Arte Oriental, una muestra cabal de que (los desolladores) se consideraban una suerte de “elite” dentro de la “fábrica-saladero”. Ahora, respecto a qué significa cada letra de las fichas, pese a las consultas realizadas no puedo ayudarlo. Tal vez por el lado de algún numismático puede tener algo más de información.
2) Saladero Tabares
Como le decía, casi la totalidad de los saladeros de Montevideo estaban instalados en la Villa del Cerro.
A principios del siglo XX las únicas excepciones eran los establecimientos de Tabares y Cía., ubicados en el borde del Cerro, en el triángulo comprendido entre el arroyo Pantanoso, el entonces Camino Nacional al Cerro (actualmente avenida Carlos María Gutiérrez) y el Camino de las Tropas.
Tabares y Cía. tenía dos saladeros en el lugar, uno contiguo al otro: El Tejera y Santa Rosa.
En 1915 vendió el primero a la multinacional estadounidense Armour, que construyó allí un frigorífico.
En tanto los Tabares continuaron desarrollando su actividad saladeril en el otro hasta la definitiva desaparición de la industria, a comienzos de la década de 1930.
Sé que usted está interesado en saber quién era Horacio Tabares, cuyo nombre aparece en las fichas. Lamento decirle que no lo sé. Después de repasar toda mi bibliografía y no encontrar allí ni una sola mención de él, recurrí a Raúl Jacob, quien considero es el historiador económico más importante del Uruguay en el tema de la industria de la carne.
Le transcribo los mail que nos intercambiamos:
Estimado Raúl:
Un amigo argentino, Marcelo Gryckiewicz, abogado y riguroso numismático aficionado con varios trabajos publicados sobre el tema, está embarcado en el estudio de las fichas y monedas acuñadas por los saladeros uruguayos.
Un tiempo atrás me escribió planteándome una serie de consultas.
Alguna, como la del saladero de Destandau, aunque parcialmente, se la voy a poder evacuar. Otras no, y aquí es donde se me ocurrió consultarlo a usted.
Este amigo tiene una fichas que por el material con el que están hechas son posteriores al fin de la Primera Guerra Mundial, que en el anverso dicen Horacio Tabares y Cía, Villa del Cerro y en el centro tienen grabadas de forma yuxtapuesta una T una H y una C, y en el reverso dicen Almacén del Saladero Tabares y al centro hay un número (en este caso 50), sin especificar a qué se refiere.
La consulta que quería hacerle es referida a quién es Horacio Tabares.
Conozco la historia de Rosauro y de sus hijos Rafael y Ramón, sus sucesores en la empresa Tabares y Cía.
Sé también que fue el último saladero que dejó de faenar, en 1928 o 1929 si mal no recuerdo.
Por lo que dice mi amigo esas fichas serían de principios de la década de 1920.
En base a estos datos mis hipótesis son las siguientes:
1) Que hacia 1920 hubieran dos saladeros Tabares y Cía. en el Cerro.
2) Que en algún momento Rafael y Ramón se separaron y cada uno por su lado tenía su saladero.
3) Que esa firma Horacio Tabares y Cía. era un almacén que hacía de proveeduría del saladero pero no tenía nada que ver societariamente con él.
4) Que tal vez Horacio Tabares fuese nieto de Rosauro e hijo de Rafael o Ramón y por algún motivo patrimonial el saladero estaba a su nombre. (Sobre esta posibilidad, rastreando en la web, en http://www.acu.com.uy/html/historia.html encontré que como vocal de la Comisión Directiva del Automóvil Club del Uruguay en 1924 figura una persona llamada Rafael H. Tabares. ¿Podría ser el hijo de Rafael y por ende el de la ficha?)
5) Que tras la muerte de Rosauro en 1909, en algún momento los Tabares hayan dividido los activos (saladero, estancias, otros) pero sin dejar de mantener algún tipo de relación comercial entre ellos. En esta opción, por ejemplo, el almacén de Horacio Tabares, supuestamente hijo de Rafael, hacía de proveeduría del saladero de su tío y su padre.
Las opciones 1 y 2 casi las descarto. En el libro La industria de las carnes en el Uruguay (fuente de consulta inevitable), de Pedro Seoane, que es de 1928, entre los saladeros que todavía continuaban faenando en esos años menciona a la firma Tabares y Cía. y su establecimiento Santa Rosa, y señala que los principales de la empresa eran Ramón y Rafael.
Desde ya muchas gracia y perdóneme por tanta lata.
Atentamente,
Rodrigo
Estimado Rodrigo:
Mis datos coinciden con los suyos y no puedo responder ninguna de sus preguntas.
Busqué en una guía del año 1920 y encontré sí un Horacio Tabares, domiciliado en la calle Maldonado 1828, de profesión hacendado, pero los que figuran como saladeristas son Ramón, Rafael y Ramón hijo. Ahora, lo que me llama la atención es que Rosauro también figura como hacendado por lo que puede suceder que la misma familia dividió entre sus miembros la gestión de sus distintos negocios. Pero esto es una suposición, no una certeza.
Es la única información que le pude hallar. Si encuentro algo más sustantivo le escribo.
Un abrazo,
Raúl
De la respuesta de Jacob se infiere, aunque en el plano de las suposiciones, que los Tabares dividieron los negocios familiares.
En ese sentido coincide con la quinta hipótesis que le plantee.
En esa línea de razonamiento creo además que Horacio Tabares debió ser hijo de Rafael y no de Ramón, puesto que el vástago de este último llevaba su mismo nombre.
Respecto a Ramón (padre), un destacado vecino del la zona del Cerro que colaboró con muchísima iniciativas, por ejemplo donando terrenos para construir viviendas populares y para hacer el primer estadio del Club Atlético Cerro (equipo que milita en la primera división del fútbol uruguayo), fue amigo personal de José Batlle y Ordóñez, dos veces presidente de la República (1903-1907 y 1911-1915) y considerado por toda la historiografía (del signo político que sea) como el “creador” del Uruguay moderno y su modelo de “Estado benefactor”. En función de estos méritos el nomenclátor de Montevideo tiene una calle con su nombre en el barrio del Cerro (http://www.montevideo.gub.uy/aplicacion/nomenclator/6968), muy próxima al lugar de donde se encontraba su saladero
A la orden para cualquier aclaración, consulta o duda.
Saludos,
Rodrigo
PD: Apenas pueda (que no sé cuándo será, pero nunca antes de marzo o abril) voy a intentar rastrear la descendencia de Rosaura Tabares. Si los logro ubicar es posible que a través de la tradición oral podamos saber con certeza quién fue Horacio Tabares y qué relación había entre él y el saladero Tabares y Cía.
Rodrigo Morales Bartaburu
Demás esta decir que vale la pena leer la interesante historia de los saladeros uruguayos. Aquí dejo link a la primera entrada:
http://rodrigomoralesbartaburu.blogspot.com.ar/2011/01/del-saladero-nacional-al-frigorifico.html Link Del saladero nacional al frigorífico extranjero
Las fichas son mías, pero todo el trabajo es de Rodrigo, que me aporto todos esos datos que no puedo encontrar en la parte numismática (exonumia para que algunos, que hilan finito, no se enojen ^o) ) Así que considere lógico ponerlo en el post invitado. 😉
Mi amigo Rodrigo Morales Bartaburu me dejo. amen de toda su investigación. esta frase:
"Si buscas resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo". (Albert Einstein) 😀
Marcelo:
Si bien las fichas están lejos de mi, por ahora, no pude parar de leer semejante trabajo de investigación, digno de un detective de Hollywood. Es apasionante.
Es una particularidad de las fichas que resulta muy pero muy atractiva.
FELICITACIONES..!! 😀
Gracias Eduardo. La verdad que la ficha te lleva a buscar siempre ya que te dice algo -lo que esta escrito/dibujado en ella- pero no te cuenta todo. Ahí es donde mi curiosidad se enciende y comienza el investigadorrr :$ . 🙂 😉
Marcelo, excelente fichas, siempre cada objeto tiene una historia importante atrás, recién termine de leerlo, me llevo algunos minutos. Nunca hubiera sabido que existian fichas de los saladeros. :O
Si andas con tiempo pasa por la pagina de rodrigo y te enteras de como funcionaban los saladeros y que su producto -el tasajo- era la comida de los esclavos. 😉
Muchas gracias por compartirlo, no conocia las fichas, esta pagina sin dudas va a ampliar mi cultura en diferentes aspectos.
Esa es la intensión. 🙂 😀 😉
Muy buenas fichas y el artículo de muy interesante lectura, la frase "Si buscas resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo". (Albert Einstein) me la apunto también…
Gracias amigo. 🙂
La verdad que con las fichas se abre mucho el campo para investigar. 😉
Excelente trabajo de investigación se mandaron. Felicitaciones y esperemos que puedas saber con certeza quien es Horacio Tabares.
En eso anda Rodrigo. 🙂 😉
Muy interesante investigacion!!!
Muchas gracias!! 😉
Profe, recién hoy me hice tiempo para leerlo tranqui (me queda pendiente el link, q voy de cabeza).
Coincido en que las fichas te llevan mucho más a investigar y eso es muy lindo!!!
Volveré… 😉
Lo lindo de la ficha es que hay que "descubrir" o "redescubrir" cosas que la gente que las utilizaba sabia, lo daba por sentado pero nunca lo transmitió.
Cuando circulo la ficha de Horacio Tabare seguro que era conocida en el entorno pero nadie anoto desde que año circulo y que se "compraba/cambiaba con ella en fin… Suerte que di con un apasionado de la historia que me dio un poco de luz sobre las fichas y se puede datar mas o menos en una década la circulación de las del Saladero Destandau. ^o) 😉
Coincido totalmente!!!! Me está pasando algo similar con las no valorizadas de La Forestal. Las identificatorias y demás, "supongo" mucho, pero me gustarían más certezas. De todos modos, no hice todavía alguna investigación para lograr esas certezas. 😉
Muy bueno!
Excelente investigacion tuya y de tu amigo , amo las fichas , gracias por compartir Marcelo 😀
🙂 😀 😉
excelente laburo! esa es la magia de las fichas!!
🙂 😀 😉