La historia y la economía de Guatemala y de la Sierra Madre son inseparables de las venturas y desventuras de una planta y de su grano rojo: el café.
Cultivo de café.
Al mismo tiempo que Brasil protagonizaba el boom del café, América Central empezaba a sembrar cafetales.
En la década de 1840, la economía de Guatemala se basaba en la cochinilla, una tintura producida por un pequeño insecto que se alimenta del cactus. Los insectos secados producen una sustancia roja que era muy solicitada en Europa.
Arriba insectos en el cactus y debajo el color que toma al ser triturados.
En 1856 cuando se invento la tintura sintética a base de anilina esta producción tenia los días contados.
Al igual que Brasil, Guatemala intento atraer mano de obra inmigrante pero fracaso, viéndose "obligados" a confiar en los aborígenes que no se sentían estimulados a trabajar por muy poco.
El gobierno solucionó el problema mediante el trabajo forzoso y el peonaje por endeudamiento.
Las fincas grandes en poder de la oligarquía local en algunos casos saboteaban deliberadamente a sus vecinos más pequeños incendiando sus pequeñas parcelas de maíz y cafetales.
La única opción que le quedaba al indígena era endeudarse para comer y así se lo podía obligar a trabajar para pagar sus deudas a él con toda su familia.
Así, la economía cafetalera de Guatemala dependía, sobre todo, del trabajo y la desdicha de la población indígena.
Con esa desgraciada base quedaba casi asegurado un futuro de injusticia y violencia.
La inmigración alemana empezó en 1863.
La tierra donde mora el quetzal tenía la comunidad alemana más grande de Centroamérica y su influencia en la economía era superior a otros países de la región.
Los primeros colonos alemanes eran jóvenes que traían recursos propios, apoyo económico de familiares o garantías crediticias de firmas comerciales de su país para iniciar empresas agrícolas o comerciales, además de facilidades que incluían el transporte de sus productos agrícolas por medio de líneas navieras hasta el comprador en Alemania.
Moneda de 2 pfennig resellada y utilizada como ficha de finca cafetalera.
Fichas de fincas alemanas:
Richard. Sapper Coban 1898.
Richard Sapper junto a su esposa Carlota inmigraron a Guatemala desde Ravensbück, Wurttemberg, en 1870 radicándose en Coban. Sapper fue "responsable" de convencer a muchas familias alemanas a seguirlo a Guatemala.
Koch Hagmann & Co.
Alfredo Horn.
La Candelaria, Cucho. 1/2 Cajón.
O. Bleuler & Co.
Edelmann, Soledad.
L.R.Brewer, Cafetal Guatimoc.
Apoyados por las principales casas bancarias de Alemania, los inmigrantes de Alemania en Guatemala, lograron obtener un gran poder económico que a su vez mejoró las relaciones comerciales entre ambos países: las exportaciones de los principales cultivos, incluyendo el café, eran controlados por los alemanes, y obtuvieron tanta importancia que incluso se crearon en Hamburgo, diversas sociedades relacionadas con las plantaciones de café con propiedades localizadas en Guatemala (cabe mencionar a la Compañía Hamburguesa de Plantaciones en Guatemala El Porvenir, San Marcos en 1889, la Compañía Hanseática de Plantaciones, S.A. de Santa Rosa y Escuintla y la Compañía de Plantaciones Chocolá, en Costa Grande Suchitepéquez). La potencialidad de zona agrícola de la costa suroccidental guatemalteca, provocó un asentamiento importante de alemanes en Costa Cuca, y la Costa Grande, que incluyó un viceconsulado asentado en Retalhuleu (1879) y luego trasladado a Quetzaltenango en 1891.
Compañía Hamburguesa de plantaciones en Guatemala.
Las fichas de zin son de especial interés. Las mismas tienen un baño plateado colocado después de realizadas fueron acuñadas probablemente después de 1895 en Alemania, muy probablemente en la ceca de Hamburgo ya que la misma comenzó a aplicar la técnica de bañar fichas alrededor de esa época.
En abril de 1917 Estados Unidos entro en la primera guerra mundial.
Para muchos alemanes en América Latina empezó la pesadilla.
En febrero de 1918 tras presiones del gobierno de Estados Unidos, Guatemala promulga una ley de expropiación de propiedad enemiga, los cultivadores alemanes en Guatemala poseían el 10% de las plantaciones que representaban el 40% de la producción de café pero controlaban por medio de sus plantas procesadoras el 80% de la producción del país.
El dictador guatemalteco Estrada Cabrera aprovecho la situación para aumentar su patrimonio inmobiliario personal.
En 1920, regresaron a Guatemala los alemanes que habíanpermanecido afuera durante la Primera Guerra Mundial, y luego de múltiplesnegociaciones con el Estado, lograron recuperar sus propiedades aquellos que teníanmayores posibilidades económicas y que anteriormente habían estructuradoconsiderablemente al comercio desarrollado entre ambos países.
Segunda guerra mundial, nuevamente el cafetal germano-guatemalteco propiedad enemiga…
El 11 de diciembre de 1941 Guatemala se encontraba en guerra con Japón, Alemania e Italia, de inmediato se dictó la suspensión de las garantías constitucionales a los ciudadanos de las potencias del Eje, con la consecuente prohibición del funcionamiento de clubes, colegios, entidades deportivas, culturales y de cualquier índole dirigidas por súbditos del enemigo (en lo sucesivo me referiré solamente a los alemanes, dejando entendido que hay otros afectados, incluso guatemaltecos relacionados con alemanes, italianos y japoneses). Quedaron congelados los depósitos y cuentas bancarias de los alemanes aunque se les permitía continuar ejerciendo funciones que no estuvieran comprendidas en tareas comerciales. Con las primeras disposiciones, el gobierno intervino el Ferrocarril de Verapaz, que será expropiado dos años más tarde. El 9 de enero de 1942 se publicaron las listas proclamadas en el periódico Diario de Centro América. En junio el gobierno dispuso la intervención de las compañías alemanas de seguros, las fincas de café, los ingenios de azúcar y otros inmuebles de los proclamados, designando al Banco Central para que hiciera un inventario detallado de los valores y existencias. Las propiedades inmobiliarias, maquinarias e industrias que no producían café fueron intervenidas por el Departamento Agrícola del Crédito Hipotecario Nacional.
Casi toda la guerra trascurrió en la presidencia del autócrata Ubico, que aplicó controles convencionales para restringir la actividad de las empresas alemanas, en especial de las enormes plantaciones de café productoras del 40% de la cosecha nacional, y de las firmas de exportación e importación, responsables del 70% de la exportación del país.
Desde diciembre de 1941, el gobierno aumentó gradualmente los impuestos a las fincas intervenidas y a las exportaciones de café, cardamomo y azúcar para destinarlos a la defensa nacional. La exportación del café de las fincas y compañías de alemanes bloqueados debía contar con la autorización del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, era condición dejar una margen de utilidad mínimo, equivalente al 1,67% de los gastos, inmovilizado en el Banco Central para la subsistencia de los propietarios alemanes. Todo excedente del precio obtenido era congelado en las cuentas del Banco Central y se podría disponer de él una vez finalizada la guerra, en caso de que no se hubiera dispuesto para otros destinos.
Pese al alineamiento con los Estados Unidos, Ubico se negaba a pasar del control a la expropiación. En noviembre de 1942, el enviado español que representaba los intereses alemanes en Guatemala daba cuenta de la resistencia del gobierno de Ubico a avanzar en ese sentido. Por su parte, un año antes, el consejero de Asuntos Económicos del Departamento de Estado juzgaba insuficiente el control para evitar que los beneficios de las empresas alemanas fuesen destinados con fines subversivos. Él recomendaba para los individuos mencionados en la lista proclamada la erradicación completa de la vida social y comercial de Guatemala, ya que, a su parecer, el plan les permitía seguir actuando en el terreno económico. En el Departamento de Estado todos estaban de acuerdo con la propuesta, la discusión se mantenía en torno al modo de llevarla a cabo. Algunos funcionarios norteamericanos reconocían la posibilidad de que la economía guatemalteca no sería capaz de soportar un impacto tan fuerte, pero no cuestionaban la decisión de destruir en gran escala la presencia económica alemana.
Tras largas negociaciones, Estados Unidos y Guatemala acordaron un sistema de cuotas que permitiera a las principales plantaciones de la lista negra exportar lo necesario para poder seguir operando, en lugar de someterlas a un embargo total. Naturalmente, esta medida trajo efectos negativos sobre el empleo y los ingresos del país.
Ubico sostenía que los Estados Unidos tenían que concederle la autoridad necesaria para poder vender el total de la producción alemana de café y depositar los beneficios en cuentas congeladas del Banco Central para que el gobierno pudiera disponer de ese capital.
El presidente prometía encargarse de las expropiaciones de los alemanes al finalizar la guerra, pero que, mientras tanto, la escasa producción estaba dañando las plantaciones. El gobierno de Guatemala no tenía ni el capital suficiente ni el poder político para expropiar a un sector tan importante para la sociedad guatemalteca, así que Ubico se mantuvo en esa posición.
Los diplomáticos norteamericanos no estaban dispuestos a tolerar semejante insolencia, y para mayo de 1942 aumentaron la presión.
Las amenazas del agregado comercial y del primer secretario de la embajada estadounidense agotaron la paciencia del presidente autócrata. El gobierno de Guatemala les declaró personae non grata y expulsó del país acusándoles de haber estado contando cuentos a la agencia Associated Press sobre la colaboración germano-guatemalteca.
La cuestión de cerró en 1944 por impulso del gobierno de Washington. El secretario Cordell Hull por medio de su embajada le comunicó al gobierno guatemalteco que a menos que nacionalizara las explotaciones de café alemanas, los Estados Unidos suspenderían las importaciones del producto.
De ejecutarse el ultimátum, el país centroamericano perdería el 40% de la cosecha del principal cultivo de exportación. El ministro de Relaciones Exteriores guatemalteco aceptó la posibilidad de nacionalizar fincas a pedido del Departamento de Estado, expresando que se procedería de mala gana, sabiendo que se trataba de una petición injustificada.
El 24 de junio de 1944, en un único decreto de expropiación, Ubico eliminó a los propietarios de las explotaciones más eficientes y productivas del país, y convirtió al Estado en gran terrateniente. Un veterano alemán del negocio cafetalero guatemalteco señaló que el valor de las propiedades y de las cuentas confiscadas a los ciudadanos de los países del Eje “debía ser mayor que la deuda pública de Guatemala”.
El decreto no mantuvo a Ubico en la presidencia. A los pocos días de ordenar la confiscación y sin llegar a conocer sus efectos, el autócrata fue derrocado por un amplio movimiento popular que, más preocupado por terminar con un régimen que llevaba décadas en el poder que por el futuro de la comunidad alemana, inició un proceso de reformas sociales. Los generales de Ubico intentaron reemplazarlo en el poder, pero en octubre de 1944 la alianza de trabajadores, estudiantes y militares descontentos mediante las armas puso fin definitivo al régimen. El nuevo gobierno convirtió al decreto en ley y ordenó la expropiación de todos los bienes de alemanes: fincas, edificios, bonos, ganado y plantaciones.
A finales de 1944, el gobierno presidido por Juan José Arévalo controlaba unas 130 grandes plantaciones de café confiscadas primero a los alemanes y después a Ubico y sus generales.
Su valor estimado era de varias decenas de millones de dólares. Sin embargo, las explotaciones no salieron indemnes de la guerra: la mala administración, la falta de incentivo y también la corrupción de los interventores en las plantaciones nombrados por Ubico conllevaron un descenso de la productividad.
En las trece propiedades alemanas más importantes la producción disminuyó en cinco millones de kilos entre 1940 y 1943.
Al igual que en Costa Rica, las expropiaciones inquietaron a la elite económica local. Si el Estado era capaz de adueñarse de las plantaciones alemanas acabaría haciendo lo mismo con las explotaciones guatemaltecas.
La presunción se hizo realidad, el movimiento que puso fin a la era de Ubico también abrió el camino para el ascenso de Jacobo Arbenz. Años más tarde la reforma agraria impulsada por su gobierno a favor de campesinos sin tierra dispararía la reacción de los grandes terratenientes, con la United Fruit Company a la cabeza. En 1954 un golpe orquestado por la CIA derrocaría al presidente Arbenz.
La desnazificación del café guatemalteco.
El pragmático dictador Jorge Ubico abandonó a sus amigos alemanes tras el ataque a Pearl Harbor y el 12 de diciembre de 1941 entró en vigor una lista negra de empresas cafetaleras "alemanas", preparada meses antes gracias a la presión del departamento de Estado norteamericano.
Los "interventores" se apoderaron de haciendas cuyos propietarios eran alemanes nativos e incluso, en algunos casos, guatemaltecos de ascendencia alemana. El gobierno administraba las fincas exportadoras de propiedad alemana. A partir de enero de 1942, muchos alemanes -incluso ancianos- fueron arrestados y enviados a campos de concentración en Texas. Nelson Rockefeller, que dirigía la oficina del coordinador de asuntos interamericanos y supervisaba los servicios de contrainteligencia, destacó la necesidad de evitar la expansión alemana en "el patio trasero de Norteamerica"
Walter Hannstein estuvo a punto de perder La Paz, su plantación de café en la región de San Marcos -oeste de Guatemala-, a pesar de que había nacido en ese país. La libertad y la plantación de Hannstein se salvaron cuando mostró al agente del F.B.I que lo interrogo la lista de 40 alemanes guatemaltecos que los nazis pensaban eliminar. El nombre de Hannstein acupaba el puesto 36 en la lista.
Ficha de plástico de la finca cafetalera "La Paz" otrora propiedad de la familia Hannstein.
Pero no todas las fincas guatemaltecas fueron propiedad de los Alemanes, aquí una muestra de 50 fichas no "alemanas" de mi colección:
Estas fichas daran lugar a otras apasionantes historias. 8-| 😉
Marcelo Gryckiewicz.
Fuentes: Wikipedia http://es.wikipedia.org/wiki/Inmigraci%C3%B3n_alemana_en_Guatemala http://guatemaladeayer.blogspot.com.ar/2011/05/historia-del-banco-central-de-guatemala.html http://www.forosegundaguerra.com/viewtopic.php?f=27&t=12786 http://books.google.com.ar/books?id=z8GpZWsAjXsC&pg=PT179&lpg=PT179&dq=alemanes+en+guatemala+en+1942&source=bl&ots=AScAEHhBAb&sig=qj1KysILXOVY1vf-LJxAgdq-D-w&hl=es-419&sa=X&ei=qjU_VMezGZbCggTA9YG4BA&ved=0CEMQ6AEwBQ#v=onepage&q=alemanes%20en%20guatemala%20en%201942&f=false http://www.academia.edu/2444246/Finca-Museo_agroindustrial_San_Juli%C3%A1n_proyecto_para_la_difusi%C3%B3n_y_la_conservaci%C3%B3n_del_patrimonio_industrial_de_Guatemala Russell Rulau Latin American Tokens ISBN-13: 978-0756784454
Van mis 10. Muy lindo post! No sabía que en Guatemala había tanto inmigrante alemán, una sorpresa para mí.
Mas 10 muy buen aporte
Fui a pagar y ya me habían pelado hoy, paso mañana :$
Con todo respeto……. BESTIAAA!!!!
Muy interesante, gracias 😉
Lindo post Marcelo !!! 🙂 😀
Gracias Hector!! 😉
Y felicitaciones por las lindas fichas que mostras ! 😉
Excelente historia y hermosas fichas! van puntos 🙂
un coctel perfecto , buen relato y excelente material !!! puntines para vos
Muchas gracias Abel. 🙂
Tremendas fichas!!!!! y muy buen informe 😉
😀 😉
Buenísimas las fichas y la historia!!!
Ahora, "Arriba incestos en el cactus"??? Me parece que te traicionó el "subconsciente jurídico", jaja!!!! 😉 😀
Subconsciente jurídico? 😐 😐 Naaaaaaaah (B) (B) (B) (D) (D) (fm) (brb)
Impresionante este post amigo mio. Cuanta historia dura, difícil, bien latina, para dar contexto a esas fichas.
Gran parte desconocida por mi.
E imagino que explicar los motivos de la inmigración alemana a Guatemala (??¡¡) debe dar para otro post.
Y esa colección de fichas… ufff…. sin palabras. :O
Los 10 del día son poco pero es lo que hay, vio?
Gracias Eduardo. Los motivos de la inmigracion germanica son el militarismo prusiano!! No te olvides que en territorio de lo que es hoy Alemania se libraron unas cuantas guerras a saber: En marzo de 1848, la revolución estalló en Alemania,en 1866 la "Guerra de las Siete Semanas", y en 1870-1871 la Guerra franco-prusiana. Todo aquel joven que no quería ser "carne de cañón" emigraba…A cualquier lado!! si a algunos "paisanos" como R. Sapper les fue bien y lo cuentan… bueno 2+2… 🙂 😉
Gracias Marcelo por otro gran relato.! Van 10! 😀
Otra mas de las tuyas tocayo. Saludos 😉 😉 😉 😉 . van puntos
😀
Cierto amigo…. ahora caigo. :$ Gracias
Si estas en Guatepeor te vas con gusto a Guatemala! :O (xD) (xD) 😉
Muy lindas fichas y muy buena historia, al final me pregunto que ganan los paises de LA con ser perritos falderos de USA? si ellos nunca nos dan nada, giatemala se autosacrifico
creo que es la primera ves que pongo puntos!!!! muy bueno!
vez!!!!!!!!
:O
Espero no sea la ultima. ^o) 😀 😉
que buena historia te felicito (Y)