La cajita que te dije (o crónica de la felicidad express)

El golpeteo de manos.
El dejar el corte de pasto, el pucha, quién será ahora, la mirada resignada obsequiada a lo que resta cortar y el ya vaaaaaaaaa.
El vecino y la cajita (que uno ve como si se tratara del vacío en una parrillada proletaria).
Y la frase matadora (que presta el título, pero que vale la pena redundar): La cajita que te dije…
Probablemente, la frase siguió, pero no podría dar cuenta de ella; doy fe que improvisé una conversación aceptable y un agradecimiento sincero, pero la codicia estaba ahí y entonces todo quedaba un poco atrás. Era de una tía; probablemente (razonablemente) viajaba mucho. Y poco más.
Regalarle un respiro al pasto y entenderlor un poco al Gollum,aparecen como colaterales razonables.
Acto seguido, el análisis detenido de la cajita; agradable a la vista (con mucho de canopla de primaria), con un estampillado filiatorio (que la propone hondureña), con unos atractivos 3/4 kilos de repiqueteantes promesas…

Deslizar la tapa pone todo a la vista (100 monedas????? 140???? no las conté, de verdad). Alguna moneda que elegiré por no tener (aunque no las junte de manera oficial); muchas que dejaré pasar a regañadientes (porque la propuesta es agarrá las que te sirvan y uno, aunque avaro y codicioso, adolece de conciencias). Y, finalmente… ellas dos…

No es que no tenga monedas de dos centavos (debe ser la pieza anterior a 1900 que la mayoría puede contar con números más altos, supongo). No es, tampoco que no tenga ese año ( que lo tengo, aunque menos enterito). Es sólo que es linda

Y esta sí. Esta no la tenía (de hecho no tenía nada de los primeros años soviéticos). Así que pasa a un lugar privilegiado de la hojita rusa (con unas pocas imperiales y algunas soviéticas más tristonas -muy Stalin y Kruschev-)

Y eso es más o menos todo.
Este ha sido un año difícil para mi colección; mucho trabajo, mucha cosa "más urgente" y mucho postergado (acabo de terminar la redacción de una tesis que venía arrastrando desde hace casi 6 años!!!!!!). Poca conección, poca (pero siempre muy grata lectura).
Espero poder rondar más seguido en lo próximo.
Y como siempre: gracias por pasar, gracias por leer, gracias por dejarme aprender y por estar ahí.
Un cordial saludo. Y un muy buen cierre de año.

Esteban