Un Águila guerrera 10. Polonia.

En el siglo X aparece Polonia como nación; la gobernaron una serie de fuertes líderes que convirtieron a los polacos al cristianismo, crearon un reino poderoso e integraron a Polonia en la cultura europea.

En el siglo XIII la fragmentación interna provoca la erosión de la nación inicial, pero a lo largo del siglo se consolida la base de un nuevo estado dominante que estaba por llegar.

Moneda acuñada en Cracovia por  Wadislaw II Jagiello (1386-1434).

La Dinastía Jogalia (1385–1569) formó la Mancomunidad polaco-lituana, comenzando con el gran duque lituano Jogaila. En 1385 se unió con Lituania tras la coronación como rey de Vladislovas II Jogaila.

Desde allí el águila polaca unió su destino al caballero lituano.

Moneda de 1/2 Groschen, 1550, acuñada en la ceca de Vilna por el Gran duque Segismundo II Augusto (1546-1572).

En el siglo XVIII, la mancomunidad afrontaba muchos problemas internos y era vulnerable a influencias exteriores. La desestabilización del sistema político llevó a la anarquía.

Atentaban las reformas, como las hechas por cuatro años de Sejm de 1788-1792, las cuales culminaron en la tercera constitución, la cual vino muy tarde y el país se había dividido entre el Imperio ruso, el reino de Prusia y el Imperio austríaco. En 1795 la Mancomunidad Polaco-Lituana desaparece del mapa europeo.

El Gran Ducado de Varsovia

Fue una unidad política creada por Napoleón I en 1807 para restablecer el Estado polaco.

El Ducado surgió tras el Tratado de Tilsit, firmado por Francia y Rusia para poner fin a la guerra de la Cuarta Coalición.

Su fundación recibió el apoyo de fuerzas republicanas en ambas partes de la dividida Polonia y de la gran diáspora polaca en Francia, que apoyó abiertamente a Napoleón como el único hombre capaz de restaurar la soberanía polaca tras la II Partición de Polonia en 1793.
Aunque fue creado como un Estado satélite (y era solamente un ducado, en lugar de un reino), era creencia común que con el tiempo la nación recuperaría su estado y fronteras anteriores.
Durante la existencia del ducado el águila volvió a ser acuñada en las monedas de la ceca de Varsovia.

Moneda de 3 grosze del año 1811 ceca de Varsovia acuñada para el gran ducado.

Los polacos esperaban en 1812 que el Ducado se convirtiera en reino durante la campaña de Napoleón contra Rusia, uniéndose a los territorios liberados del Gran Ducado de Lituania.

Sin embargo, Napoleón no tomó una decisión permanente al respecto, pues hubiera acabado con las posibilidades de una paz anticipada con Rusia.
No obstante, proclamó el ataque a Rusia como la Segunda Guerra Polaca.
La paz no llegó, sin embargo. La Grande Armée de Napoleón, incluyendo un sustancial contingente de tropas polacas, se puso en marcha con la ambición de poner al Imperio ruso de rodillas, pero sus ambiciones militares fueron frustradas por una combinación de los rusos y del General Invierno; pocos volvieron de las marchas hacia Moscú.

Tras la derrota de Napoleón en el Este, la mayor parte del territorio del Ducado de Varsovia fue conquistado por Rusia en enero de 1813, en su avance hacia Francia, y por sus aliados alemanes.

El resto del Ducado pasó al poder de Prusia. Aunque varias fortalezas aisladas resistieron por más de un año, la existencia del Estado acabó en todo menos en el nombre. Alejandro I de Rusia creó un Consejo Supremo Provisional del Ducado de Varsovia para gobernar el área a través de sus generales.

El grueso del Ducado de Varsovia, con unos 128,000 km² de área, se estableció como el "Reino del Congreso" de Polonia, en unión personal con el Imperio ruso.


1 grosz 1817 acuñado en la ceca de Varsovia, el águila polaca se encuentra en el centro del águila bicéfala.

Su autonomía perduró hasta 1831, en que fue anexionado por Rusia, después del levantamiento de noviembre: La revolución polaca comenzó el 29 de noviembre de 1830 en Varsovia, protagonizada por un grupo de jóvenes conspiradores de la escuela de oficiales del ejército que pronto fueron respaldados por buena parte de la sociedad polaca. Pese a lograr algunas victorias locales (batalla de Stoczek, 14 de febrero de 1831, batalla de Olszynka Grochowska, 25 de febrero), el levantamiento, convertido en una verdadera guerra ruso-polaca, fue finalmente aplastado por el ejército ruso.

De este periodo insurrecto existen monedas con el águila y el caballero que rememoran las monedas de la mancomunidad.

Moneda de 5 Zlotych acuñada en la ceca de Varsovia por los insurrectos.

Durante la Primer guerra mundial la Polonia rusa es ocupada en su totalidad por tropas alemanas y austro-hungaras.
Los imperios centrales deciden declarar la independencia de la Polonia rusa creando un estado títere.
Vuelve a ser acuñada el águila en monedas para Polonia.

5 fenigow, 1917, acuñado en Stuttgart.

Después de la primera guerra mundial surge una nueva Polonia con territorios que habían estado bajo el dominio ruso, alemán y austro-hungaro.

el águila blanca coronada surge como emblema en las monedas polacas.

10 zlotych acuñado en la ceca de Varsovia en 1932.

Durante el periodo de la segunda guerra mundial el águila se oscurece, al ser acuñada en zinc por uno de los ocupantes, tal vez acompañando uno de los periodos más negros que ha tenido que afrontar el pueblo polaco.

Moneda de 10 groszy del año 1923 reacuñada en zinc por los ocupantes alemanes en 1941-44.

En la Polonia ocupada por Alemania, rápidamente la calidad de vida de los polacos, especialmente de los judíos de Polonia, se empezó a deteriorar, ya que la ideología nazi los calificaba como infrahumanos.
En la lado soviético, la población también fue perseguida, en este caso no por su raza sino por su afiliación política.
En la llamada masacre de Katyn, miles de oficiales polacos fueron ejecutados en masa. (El número de víctimas es calculado en cerca de 22 000, siendo 21 768 el número de cadáveres identificados)
Se estima que la cantidad de víctimas de nacionalidad polaca en la Segunda Guerra Mundial fue de alrededor de 850.000 militares y 6.000.000 de civiles lo que da un total de 6.850.000 personas. Esta cifra de bajas es una de las más altas en dicho conflicto.

Terminada la segunda guerra mundial la Polonia que resurge, con nuevas fronteras corridas más al oeste, tiene la impronta de las repúblicas populares implantado en todos los territorios ocupados por el ejercito rojo. Consecuentemente el águila pierde su corona.

10 zlotych 1970 conmemorando los 25 años de las provincias anexadas del oeste.

En 1990, con los nuevos tiempos,  con posterioridad a la caída del muro de Berlín y del bloque soviético el águila polaca vuelve a ser coronada.

Moneda de oro de 200 zlotych con imagen del hijo predilecto de Polonia: Juan Pablo II.

El siglo XXI encuentra al águila polaca acuñada en oro nórdico.( aleación de la que están formadas las monedas de 50, 20 y 10 céntimos de euro. También se ha empleado durante un cierto periodo de tiempo en otros países, como por ejemplo en la moneda de 10 coronas suecas. A pesar de lo que indica su nombre, no contiene oro, y su composición es la siguiente: cobre 88 %, aluminio 5 %, zinc 5 %, estaño 2 % )

Tal vez, en pocos años, el zloty deje de ser la moneda nacional polaca para ser sustituida por el euro, pero seguramente el águila seguirá junto a su nueva moneda. 😉

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Mapa que representa los distintos cambios de frontera de Polonia.

Próximo post de esta serie: Un Águila guerrera 11. Rusia.

Marcelo Gryckiewicz.

Fuente Wikipedia.

6 comentarios en “Un Águila guerrera 10. Polonia.

  1. muy buen post, te felicito por la información brindada muy interesante y con respecto a lo dicho por romagnolo a mi entender no es un águila sino un gallito de riña :mrgreen: :mrgreen:

  2. @lvelazco88 muy buen post, te felicito por la información brindada muy interesante y con respecto a lo dicho por romagnolo a mi entender no es un águila sino un gallito de riña :mrgreen: :mrgreen:

    Si esta flacucha. 😀

  3. Interesante post, como siempre, Marcelo. De las que mostras, tengo dando vueltas por ahí una de las pequeñitas del águila de Wadislaw II Jagiello. Son bastantes escasas de hallar en estado digno, y dado que el fino de la plata no es de buena pureza, suelen aparecer «ennegrecidas». Curiosamente, he descubierto en ocasiones que algunos vendedores la toman como una moneda común de cobre y la tienen suelta en sus bandejas de saldo, cuendo en realidad se trata de una pieza más que interesante y para nada común. Por ende, vale la pena estarse atento, ya que puede aparecer sumergida en una de estas bandejitas:P

  4. @zahir rojo Interesante post, como siempre, Marcelo. De las que mostras, tengo dando vueltas por ahí una de las pequeñitas del águila de Wadislaw II Jagiello. Son bastantes escasas de hallar en estado digno, y dado que el fino de la plata no es de buena pureza, suelen aparecer «ennegrecidas». Curiosamente, he descubierto en ocasiones que algunos vendedores la toman como una moneda común de cobre y la tienen suelta en sus bandejas de saldo, cuendo en realidad se trata de una pieza más que interesante y para nada común. Por ende, vale la pena estarse atento, ya que puede aparecer sumergida en una de estas bandejitas:P

    Siempre hay que estar atento…

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